Callada y observadora, como se lo permiten sus ojazos, tan claros como luminosos, así se deja ver Candela. No será casual que sus dominios se llamen Essence por aquel viejo dicho que de la abundancia del corazón habla la boca, pero ya digo que ella es silenciosa, otra cualidad de las esencias, que se dejan percibir sin alharacas, simplemente sorprendiéndote y deleitándote hasta la saciedad, lo propio de las buenas cualidades. Post 1373
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