Es así día a día, latidos continuos del corazón, como las hojas arrancadas de un taco de calendario, los post caen en el diario. A veces las palabras fluyen como el agua en el manantial a borbotones sugiriendo fertilidad. Otras se escatiman o se esconden como las trufas bajo tierra. Otras veces aparecen aisladas como setas. O granadas como en los rosales de floribundas o los parterres cuajados de flores. Son las sorpresas y los prodigios de la naturaleza que florece y se desparrama en la primavera y sobrevive en otras estaciones.
lunes, 6 de octubre de 2014
COMO EL AGUA EN EL MANANTIAL
Es así día a día, latidos continuos del corazón, como las hojas arrancadas de un taco de calendario, los post caen en el diario. A veces las palabras fluyen como el agua en el manantial a borbotones sugiriendo fertilidad. Otras se escatiman o se esconden como las trufas bajo tierra. Otras veces aparecen aisladas como setas. O granadas como en los rosales de floribundas o los parterres cuajados de flores. Son las sorpresas y los prodigios de la naturaleza que florece y se desparrama en la primavera y sobrevive en otras estaciones.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Ya te dije que te quiero mucho, Namita?
ResponderEliminar