No lo soy, aunque algunas me lo llamen por mi tendencia a subirme a la parra. ¿Es posible que yo con mis trazas lo sea? No te digo nada de lo que pienso de mi cuando me veo por las mañanas desgreñada, recién levantada. Como mi cuerpo, a veces desnudo mi mente y dejo que se muestre en estado puro. Con sus dudas y vacilaciones. Con sus muchas preguntas y pocas respuestas... pero de ahí a que sea filósofa! ¿O es que la filosofía es hacer preguntas sin respuestas o tirar del hilo sin llega nunca al final del ovillo? Eso tiene otro nombre y es lo que soy. Pero procuro serlo con delicadeza, aunque a veces parezca pedantería cuando es tan sólo rebuscada simpatía. Ahí me quedo.
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